“Esta es la versión final de un texto pedagógico que he ido
perfeccionando progresivamente a lo largo de una carrera académica de
más de treinta años. A principios de los años 70, un cúmulo de
circunstancias favorables me llevó a enseñar el análisis económico
marxista del sistema capitalista, primero en la Universidad Católica del
Perú, luego en la Universidad Católica de Lovaina. En ambas
Universidades la presión estudiantil había forzado a las autoridades a
aceptar la creación de tal curso, y éstas me encargaron la enseñanza de
la materia. Mi formación previa difícilmente me había dado una
iniciación seria al marxismo : ésta se limitaba a algunos breves
resúmenes, seguidos por críticas inmediatas cuyo carácter simplista y
falaz no podía percibir en aquel momento. Debo agregar que mi formación
previa no me había entusiasmado : el divorcio entre las sofisticaciones
teóricas y las realidades concretas me causaba un creciente desencanto
con el enfoque económico dominante. Cuando comencé a estudiar El
Capital, en 1970, comprendí hasta que punto mis opiniones sobre el
marxismo eran meros clichés transmitidos por la ideología imperante ;
también comprendí de qué forma en el enfoque marxista era posible
combinar el rigor del método científico con la atención a los problemas
más concretos y cotidianos.
Si bien mis sucesivos libros han
resultado directamente de actividades académicas, nunca he pretendido
que sean para uso exclusivo de los estudiantes. De hecho, sus contenidos
se han beneficiado de múltiples actividades de formación llevadas a
cabo fuera del ámbito universitario. En estas actividades he tenido la
oportunidad de conocer las inquietudes de un amplio espectro de personas
: sindicalistas, maestros, miembros de organizaciones políticas,
militantes de asociaciones, industriales, o también « simples ciudadanos
», todos ellos deseosos de comprender mejor la situación económica del
momento. Mis libros han sido redactados pensando en todas esas personas
también : en la medida de lo posible, he tomado en cuenta sus
observaciones y sugerencias y he limitado lo que podía parecer «
teorización gratuita » a un mínimo. Poco a poco, por consiguiente, he
perfeccionado la exposición teórica : la he limitado a los aspectos
esenciales – que han sido mejor aclarados – y he relegado a los
apéndices una serie de precisiones y debates que, en vez de orientar al
lector, podrían desviarlo en su exploración de las realidades
económicas.
Sin embargo, aunque el objetivo del libro es explicar las realidades
del mundo actual, los primeros capítulos (II y IV en particular) pueden
parecer muy teóricos, sin relación directa con la experiencia cotidiana.
Algunos lectores, más ávidos de explicaciones concretas que de teoría,
podrían experimentar cierto cansancio e impaciencia con estos capítulos.
Por ello, yo les aconsejería que lean la introducción y pasen
directamente a los capítulos VII y IX. Estos capítulos, que analizan las
tendencias básicas y las crisis del sistema, están claramente
conectados con problemas de actualidad ; y sus ideas esenciales pueden
captarse intuitivamente desde un principio. Esta lectura previa, aun
rápida, podría ser incluso interesante para cualquier lector : por una
parte, éste puede encontrar allí un estímulo para emprender después el
estudio sistemático del libro ; además, al volver a los capítulos VII y
IX, se dará cuenta de cuánto ha progresado en su comprensión de los
mecanismos fundamentales de la economía capitalista”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario